VISIÓN
Nuestra filosofía disciplinaria se basa en los siguientes principios:
- Sabemos que todos los niños quieren aprender y ser exitosos.
- Nuestro trabajo es ayudar a los niños a desarrollar independencia (auto-control y auto-disciplina)
- Priorizamos la dignidad y el valor de cada niño.
- Los errores son una parte natural y esperada del proceso de aprendizaje.
- Nos esforzamos por crear un ambiente libre de juicios.
- Nuestro trabajo consiste en enseñar a los niños a ser miembros de una comunidad democrática.
- Trabajamos para desarrollar un sentido de pertenencia en la comunidad, en el aula y en la escuela.
- Nos esforzamos para combinar amabilidad y firmeza en nuestro trabajo con los niños.
- El comportamiento de los niños refleja sus necesidades, y es nuestro trabajo identificar y satisfacer esas necesidades.
- Nuestro trabajo es crear un ambiente donde el niño se sienta seguro y amado.
REGLAS
- Cuidarse a uno mismo.
- Cuidar uno al otro.
- Cuidar a nuestra comunidad.
HERRAMIENTAS
Utilizamos estas estrategias para establecer y mantener una disciplina efectiva:
- Control cooperativo (dando opciones a los niños, oportunidades para el liderazgo, responsabilidades dentro del salón de clases en todas las edades)
- Comunicación afectiva (contacto físico, palabras positivas, agacharse y hablar uno a uno)
- Ayudamos a los niños a buscar maneras de manejar sus sentimientos y emociones en situaciones difíciles (por ejemplo, la respiración profunda, el tiempo de calma, etc.).
- Reconocer límites de maestros y buscar apoyo cuando sea necesario. Los maestros se apoyan entre sí en todo momento en nuestro trabajo con niños. Pedimos ayuda para evitar la frustración o la ira.
- Clases dinámicas y actividades lúdicas: Creamos un currículo que responda a los niños dónde están académicamente, físicamente y emocionalmente.
- Responsabilidades en el aula para cada niño: Queremos que los niños se sientan como contribuyentes importantes para el éxito de la clase
- Asambleas escolares y reuniones de aula: Estas pueden ser celebraciones y/o tiempos para resolver problemas.
- La intervención temprana: redirigir los comportamientos problemáticos en niveles muy bajos, antes de que sean exagerados.
- Ayudamos y capacitamos a los niños a resolver problemas y buscar soluciones mutuamente aceptables (donde todos ganan).
- Establecer rutinas estables y predecibles.
- Nuestro lenguaje es consistente y positivo, y nuestro tono es neutro.
- Cuando hablamos de situaciones con niños, estamos seguros de que hay una solución positiva.
INTERVENCIONES
- Redirigimos e intervenimos cuando sea necesario en niveles muy bajos, a fin de evitar comportamientos más extremos.
- Establecemos un diálogo con los niños y, a veces las familias, para generar soluciones y acuerdos para el éxito.
- Comunicación afectiva (contacto físico, palabras positivas, agacharse y hablar uno a uno)
- Ofrecemos a los niños un «tiempo de calma», con el fin de dejar espacio a los niños a procesar y moverse más allá de los problemas inmediatos.
- Buscamos consecuencias naturales y lógicas que enseñan y redirigen en lugar de castigar.